Cuando me siento atada y decepcionada de la vida y la gente que me rodea, suelo mirar ahí adentro y le toco la puerta a mi niña, esa que aun vive en mi, esa que creció con el alma y el corazón lleno de esperanza, pintando siempre las nubes de color de rosa, los cielos con dorado el atardecer, y llenando su vida con destellos de inocencia donde el mundo y las personas que habitan en el son seres buenos maravillosos brillantes y divertidos, y cuando ella me lo recuerda y me mira con esos ojos llenos de ternura, es cuando empiezo a sanar y veo mi vida de nuevo pintada de azul llena de seres brillantes y dispuestos a disfrutar el regalo de estar hoy y mirar este día, como la única oportunidad de vivir, amar, jugar y divertirnos como si no existiera la edad, sentirnos libres de prejuicios preocupaciones, de envidias, de egos, solo con las ganas de salir y decirle al primero que pase, hola, quieres ser mi amigo?, podemos jugar e inventar un mundo maravilloso donde todos los niños como y tu y yo pueden salir de ese cuerpo de adulto y mirar al mundo como una gran aventura. Hoy te invito a mirar dentro de ti a esa criatura llena de ternura y ven a jugar conmigo hasta que el hoy se nos vaya a terminar.
La inocencia es el valor que nos debería durar toda una eternidad.
Feliz Día del Niño.